.."No es tarea sencilla llevar la contraria al espíritu inmundo de nuestra época; pero cuando esta tarea se realiza en la confianza de que una voluntad sobrehumana nos protege y brinda fuerzas, no hay quien pueda derrotarnos. Es una lección teresiana que nunca me ha fallado; y que aconsejo vivamente."
... Teresa llevaba una armadura muy dura que le permitía repeler los embates y las asechanzas y las órdenes irracionales y las insidias de sus enemigos y detractores. Ella explicó reiteradamente el nombre de esa armadura: «Sólo Dios basta».
...Teresa primero se allanaba ante la voluntad divina, que es el único modo verdaderamente eficaz de renegar de la voluntad del mundo y de hacerse fuerte contra sus cánticos de sirena; después se dejaba conquistar por esa voluntad divina, confiaba cada brizna de su voluntad a una voluntad sobrehumana que la trascendía; y, por último, dotada de esa voluntad de hierro, se enfrentaba sin miedo a los poderosos del mundo, sabiendo que ellos no contaban con esa fortaleza, sabiendo que tarde o temprano flojearían ante su tozudez y se amedrentarían ante su confianza. Porque quien en nada cree, quien sólo se guía por intereses, quien se atrinchera en consignas y formulismos vacuos, acaba vacilando, temblando, retrocediendo ante quien cree; y esta vacilación le resta fuerza persuasiva, primero ante los demás, después ante su propia conciencia (si es que la tiene).
Es una triste verdad que quien en nada cree, quien sólo se guía por intereses, quien se atrinchera en consignas y formulismos vacuos suele contar con la maquinaria del poder, que le permite actuar contra quien sólo cuenta con su voluntad de hierro, acallándolo, reprimiéndolo, triturándolo corporal y anímicamente; pero todas estas violencias no son, a la postre, sino un reconocimiento anticipado de su derrota.
No es tarea sencilla llevar la contraria al espíritu inmundo de nuestra época; pero cuando esta tarea se realiza en la confianza de que una voluntad sobrehumana nos protege y brinda fuerzas, no hay quien pueda derrotarnos. Es una lección teresiana que nunca me ha fallado; y que aconsejo vivamente a mis lectores.
Juan Manuel de Prada, para leer el artículo completo ir a:
http://www.religionenlibertad.com/una-leccion-teresiana-45115.htm
... Teresa llevaba una armadura muy dura que le permitía repeler los embates y las asechanzas y las órdenes irracionales y las insidias de sus enemigos y detractores. Ella explicó reiteradamente el nombre de esa armadura: «Sólo Dios basta».
...Teresa primero se allanaba ante la voluntad divina, que es el único modo verdaderamente eficaz de renegar de la voluntad del mundo y de hacerse fuerte contra sus cánticos de sirena; después se dejaba conquistar por esa voluntad divina, confiaba cada brizna de su voluntad a una voluntad sobrehumana que la trascendía; y, por último, dotada de esa voluntad de hierro, se enfrentaba sin miedo a los poderosos del mundo, sabiendo que ellos no contaban con esa fortaleza, sabiendo que tarde o temprano flojearían ante su tozudez y se amedrentarían ante su confianza. Porque quien en nada cree, quien sólo se guía por intereses, quien se atrinchera en consignas y formulismos vacuos, acaba vacilando, temblando, retrocediendo ante quien cree; y esta vacilación le resta fuerza persuasiva, primero ante los demás, después ante su propia conciencia (si es que la tiene).
Es una triste verdad que quien en nada cree, quien sólo se guía por intereses, quien se atrinchera en consignas y formulismos vacuos suele contar con la maquinaria del poder, que le permite actuar contra quien sólo cuenta con su voluntad de hierro, acallándolo, reprimiéndolo, triturándolo corporal y anímicamente; pero todas estas violencias no son, a la postre, sino un reconocimiento anticipado de su derrota.
No es tarea sencilla llevar la contraria al espíritu inmundo de nuestra época; pero cuando esta tarea se realiza en la confianza de que una voluntad sobrehumana nos protege y brinda fuerzas, no hay quien pueda derrotarnos. Es una lección teresiana que nunca me ha fallado; y que aconsejo vivamente a mis lectores.
Juan Manuel de Prada, para leer el artículo completo ir a:
http://www.religionenlibertad.com/una-leccion-teresiana-45115.htm